jueves, 15 de julio de 2010

Viento Sur

La vereda forjada hace tanto tiempo,
conserva su calor de hierro edurecido.
La carretera que algun día se construyó,
esa misma, la que nadie al fin, usó.

Tu, el ultimo habitante de ese pueblo,
al que perteneciste y fue olvidado,
junto con la carretera,
en la que ahora reposas recordando...

Flecha azul de madera,
fuego que quema,
llama dura,
sangre seca.

Dejaste el pueblo que nunca fue visto,
caminas por la ruta,
te agota la distacia,
es tanto lo que buscas...

Sos una grieta en el camino,
andas sabiendo que para vos no tiene fin.
No verás a nadie en la vera,
solo hasta morir.

A lo lejos se vislumbran cabellos,
debe ser el angel, ha vuelto.
Sus manos saludan tu cuerpo dormido,
sobre el asfalto candente que anuncian el frío.

Tus ojos se cierran de paz,
soy yo el que me acerco,
de negro vengo a tu tumba.
Ya no imploras, buscas el Sueño.

Tu aliento ya es viento,
vuelve a la profundidad de la selva.
El cielo riega la tierra,
ahora que tu formas parte de ella...

1 comentario:

  1. Muy lindo che, se murió entonces. Pasó a ser parte de la eternidad.

    Un abrazo vieja, nos vemos

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