Nuevas tristes sobras grises.
No mas mares violáceos,
no mas astillas de truenos.
Las casas aúllan,
Todo tiene un origen
las camas tapan a los jabalíes tormentosos,
solo caminar me otorgaría el resplandor.
De noche juego a que la vida me regala cuchillos,
malabares que curten mis manos.
Una poción que me alargaría la espera.
De verte llegar.
A mi lado solo un gruñir, de pétalos de rosas, mientras que uno por uno voy desangrando la flor;
"¿Me quiere?" el polen se enceguece por el sol. "¿No me quiere?" La mutilación deja a la rosa calva y a un corazón lleno de espinas.
Me gusta.
ResponderEliminar¿Cambio de look del blog, o soy muy daltónica?
Besos